El crecimiento del mercado de la gamificación es indudable, y son muchas las firmas que han generado estadísticas sobre esta tendencia. Por poner un ejemplo, en 2018 este mercado tenía un valor de $6,8 billones a nivel global y la previsión es que crezca hasta los $40 billones en 2024.
Uno de los ámbitos donde crece más la demanda para utilizar la gamificación es en marketing, con el objetivo de enriquecer la experiencia de los usuarios y los clientes. ¿Por qué? La alta penetración de los móviles smartphone e Internet entre la sociedad ha generado muchos cambios en el comportamiento, los gustos y preferencias de los usuarios, sobretodo en la generación millennial y posteriores. Para la mayoría de las marcas, obtener la atención y el engagement de la audiencia es fundamental para convertirlos a clientes, y la gamificación en las acciones de marketing se vuelven imprescindibles para conseguirlo.
Los usuarios quieren experiencias más completas y divertidas; valoran que las marcas les ofrezcan retos y juegos que les entretengan. Las marcas que proporcionen estos pasatiempos son las que consiguen captar mejor la atención y el compromiso de la audiencia. Además, gracias al uso habitual de las redes sociales por parte de estas generaciones, se ha conseguido una difusión rápida y amplia de las dinámicas gamificadas. Los usuarios se comprometen con la marca por la diversión y las recompensas que les ofrece, y se convierten en embajadores y altavoces de la misma.
El Plan de marketing con objetivos concretos
¿Cómo puede cualquier marca introducir la gamificación en su plan de marketing y en su social media plan para aprovechar sus ventajas? La tecnología ha avanzado mucho también en este sentido. Plataformas como Easypromos permiten generar minijuegos para interactuar con la audiencia y generar esas experiencias gamificadas que ayudan a la marca conseguir más engagement y retención de usuarios. Su configuración es fácil, sin necesidad de programación, y con herramientas clave para conseguir los principales beneficios de las promociones.
Aún así, lo primero es que en el plan se hayan indicado claramente los objetivos de marketing que se quieren conseguir en ese período, normalmente a un año vista. Utilizar los criterios SMART permite generar los objetivos de forma coherente y ordenada, y facilita revisar los resultados y conocer su nivel de consecución.
A modo de ejemplo, escribimos a continuación algunos objetivos SMART (S específico, M medible, A alcanzable, R relevante y T a tiempo) que puedes tener en mente y que se relacionarían muy bien con la gamificación:
Objetivo 1: Convertir el 15% de las visitas web a leads utilizando herramientas para captar datos y así empezar acciones de email marketing durante los próximos 6 meses.
S: Convertir las visitas de nuestro sitio web a leads
M: 15% de las visitas
A: utilizando herramientas para captar datos
R: para trabajarlos con email marketing
T: en los siguientes 6 meses
Objetivo 2: Aumentar el reconocimiento de marca entre el público online en el próximo mes utilizando dinámicas de promoción y juego.
S: Aumentar el reconocimiento de marca entre el público online
M: consiguiendo 50 menciones en redes sociales y 20 horas de impacto de marca
A: utilizando dinámicas de promoción y juego
R: para mejorar el posicionamiento online de la marca
T: en el próximo mes
Definir las acciones gamificadas del plan de marketing
Es en el momento de definir la estrategia y las acciones a realizar para conseguir los objetivos, donde es importante seleccionar aquellas que reporten más beneficios. Las acciones gamificadas conseguirán generar la atención y el engagement suficiente como para dar un empuje a los usuarios y realizar la acción que queremos. Veamos dos ejemplos de gamificación teniendo en cuenta los objetivos SMART marcados en el apartado anterior.
Acción para convertir las visitas web
Integrar una ruleta de premios que capte la atención de los visitantes. Esta acción es muy recomendada en e-commerce pues permite captar los datos de los visitantes que están interesados en nuestro producto pero que necesitan un incentivo para comprar, por ejemplo, un cupón. Igualmente, también conseguiremos los datos de aquellos que no comprarán inmediatamente pero que quizá quieren continuar recibiendo nuestras ofertas y participando en nuestros juegos.
Es el caso del siguiente ejemplo, un operador de vuelos y viajes que difundió en el banner principal de su web una ruleta para sorteo de premios: cupones y pequeños regalos. De esta forma, se introduce el juego de azar y se motiva al usuario a interactuar con la marca.
Otros mini-juegos pueden servir para el mismo objetivo: una sopa de letras, un memory o un puzzle que pongan a prueba los visitantes y los obsequien con premios o descuentos según sus habilidades.
Acción para aumentar el reconocimiento de marca
Crear y difundir un juego divertido e interesante para la audiencia online que permita exposición y reconocimiento de los elementos de la marca y de sus productos. Ofreciendo un reto a los usuarios se aumenta el engagement, lo que genera muchos beneficios para la marca: los participantes suelen comentar más en los perfiles sociales, compartir sus experiencias entre su comunidad online y prestar más atención a acciones futuras. La marca pasa a ser reconocida entre esos usuarios y a obtener un sentimiento positivo de ellos.
En el siguiente ejemplo, esta cadena de librerías promocionó sus productos asociados a su logo utilizando un juego de memoria. De esta forma, conseguía que su marca se difundiera y conociera más en el entorno online, al mismo tiempo que recomendaba sus mejores productos, todo en la época de la campaña de Navidad. La marca consiguió más de 1.000 participantes, se jugaron más de 8.000 partidas de memory y se consiguió impactar a los usuarios durante un tiempo equivalente a 12 horas.
Definir los KPI de gamificación en plan de marketing
Si se han redactado bien los objetivos SMART, ya llevan implícitos la forma en la que mediremos los resultados. Aún así, siempre es recomendable un apartado donde concretemos los indicadores que se analizarán para valorar si los objetivos se están consiguiendo.
Retomando los dos objetivos definidos anteriormente, vamos a señalar qué KPI’s se pueden introducir que tengan en cuenta el aumento del engagement debido a la gamificación.
A los clásicos indicadores de “páginas vistas”, “visitantes únicos”, “emails abiertos”, añadiremos aquellos que provienen de la dinámica gamificada. En el caso del objetivo 1, convertir el 15% de las visitas web a leads, saber el número de conversiones a lead provenientes del juego será fácil gracias a las estadísticas de la app. Sólo tenemos que tener en cuenta las fuentes de tráfico que ha tenido ese juego. En el siguiente ejemplo, vemos que el juego ha obtenido más de 1.500 participantes de la fuente “widget web”, del juego embebido en la web de la marca.
Así pues, en un plan de marketing con dinámicas de gamificación, los participantes obtenidos serán otro indicador interesante a monitorizar. También sobre la misma acción será importante conocer cuántos clics han realizado en los botones de “compartir” el juego, o de “seguir” la marca en las redes sociales, así como el tiempo de los participantes invertido en el juego. Otros KPI’s interesantes serán conocer cuántas partidas jugadas y cuántos premios repartidos.
Si vamos al objetivo 2, aumentar el reconocimiento de marca entre el público online, los minutos de juego son un buen indicador para valorar cuánto tiempo se ha impactado con el logo y otros elementos corporativos.
Otros objetivos de tu plan de marketing que puedes conseguir con gamificación
En general, los juegos, minigames y otras acciones gamificadas te permiten conseguir tus objetivos promocionales con acciones interactivas. Utilízalos si en tu plan de marketing tienes previsto alcanzar estos retos:
- Aumentar la conexión y el engagement con la audiencia. Al presentarles un juego, les estás proponiendo una participación más elevada con tu marca, y esto genera una relación más intensa que un simple “me gusta”.
- Lograr espacios de marca digital. Los juegos de marca conducen a la participación del consumidor, la retención y un aumento en el valor de la marca, el conocimiento y las ventas. Los juegos de marca tienen la oportunidad de convertirse en espacios de marca digital donde la marca y el usuario interactúan en un universo atractivo y de mútuo acuerdo.
- Captar datos de contacto de clientes potenciales o seguidores. Para finalizar la partida, pídeles que se registren para ver la puntuación, acceder al ranking y/o conseguir un premio.
- Ofrecer contenido diferencial respecto a los competidores. Imprescindible en cualquier social media plan, es necesario ofrecer diferentes tipos de contenido a la audiencia también para divertirla y entretenerla, no solo para que compre o para educarla.
- Trabajar la lealtad a la marca. Nunca olvidar que un cliente satisfecho y cuidado repetirá compra y además se convertirá en un embajador de la marca. Ofrecerle diversión y premios es una acción ideal para cuidar la relación con el cliente.
Cuando llega el momento de plantear un plan de marketing, sea uno de global para la empresa, para un nuevo producto o para una acción en concreto, necesitamos poner toda la artillería sobre la mesa. Apostar por la gamificación a veces cuesta porque es un aspecto novedoso, con mucho más recorrido en el mundo de las relaciones laborales y la educación. Aún así, sus beneficios son tantos y tan diversos, y sus acciones actualmente tan asequibles, que te animamos a atreverte y añadir juegos y acciones gamificadas en tu plan.
¿Tienes dudas? Contáctanos en el chat y te ayudaremos a resolverlas, así como te aconsejaremos para que escojas la mejor dinámica para obtener tus objetivos. ¡Pruébalo ya y diviértete con tu audiencia!